En la búsqueda de métodos anticonceptivos eficaces, el implante subdérmico ha emergido como una opción popular. Conocido comúnmente como el ‘dispositivo del brazo’, este pequeño pero poderoso método anticonceptivo ofrece una solución a largo plazo para la planificación familiar. 

En este artículo, exploraremos cómo funciona este dispositivo, su proceso de inserción, beneficios, posibles efectos secundarios y mucho más.

¡Comencemos!

¿Qué es el implante subdérmico o dispositivo del brazo?

El implante subdérmico es un pequeño dispositivo anticonceptivo, del tamaño de un fósforo, que se inserta bajo la piel del brazo. 

Compuesto principalmente de un material plástico flexible, contiene una hormona llamada progestina, similar a la progesterona que el cuerpo produce naturalmente. 

Una vez implantado, libera de manera continua y controlada pequeñas cantidades de esta hormona en el torrente sanguíneo. 

Su principal función es prevenir la ovulación, es decir, impide que los ovarios liberen óvulos. Además, espesa el moco cervical, lo cual dificulta el paso de los espermatozoides hacia el útero, y adelgaza el revestimiento del mismo, reduciendo las posibilidades de que un óvulo fertilizado se implante. 

Este dispositivo puede proporcionar una protección anticonceptiva efectiva durante un periodo de hasta 5 años, convirtiéndolo en una opción a largo plazo para quienes buscan evitar el embarazo.

Proceso de Inserción del dispositivo del brazo

El proceso de inserción del implante subdérmico es un procedimiento rápido y sencillo que se realiza en una clínica o consultorio médico. 

Antes de la inserción, se realiza una consulta en anticoncepción para asegurar que el implante es adecuado para la usuaria. 

Durante el procedimiento, el área del brazo donde se colocará el implante se limpia y desinfecta. 

Luego, se administra anestesia local para minimizar cualquier molestia. A continuación, el profesional de la salud utiliza un aplicador especial para insertar el implante bajo la piel, generalmente en la parte interior del brazo, cerca del bíceps. 

La inserción es rápida y, en la mayoría de los casos, no requiere puntos de sutura. Tras la inserción, se proporcionan instrucciones específicas sobre los cuidados post-inserción, como mantener el área seca y evitar ejercicios pesados durante un corto período. 

Es normal experimentar algo de sensibilidad o inflamación en el sitio de inserción, pero estos efectos suelen ser temporales.

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Eficacia y ventajas del dispositivo del brazo

El implante subdérmico destaca por su eficacia y múltiples ventajas, ofreciendo una solución anticonceptiva cómoda y discreta. 

Una de sus principales fortalezas es su capacidad de operar de manera autónoma; una vez colocado, no requiere de acciones o recordatorios adicionales por parte del usuaria. 

Este método es también una opción segura y efectiva para personas en período de lactancia, garantizando protección sin interferir con el proceso de amamantamiento. 

Además, ofrece beneficios en términos de salud reproductiva, como la reducción de los cólicos menstruales y los sangrados abundantes, mejorando la calidad de vida durante el ciclo menstrual. 

Su diseño prácticamente invisible y su colocación subdérmica aseguran que no se note ni incomode en la realización de actividades cotidianas. 

Otro beneficio significativo es la disminución del riesgo de cáncer uterino, lo que añade una capa adicional de protección a largo plazo para la salud. 

Por último, su presencia no interfiere en absoluto con las relaciones sexuales, permitiendo una experiencia natural y sin preocupaciones adicionales. 

En conjunto, el implante subdérmico representa una opción anticonceptiva moderna, segura y altamente beneficiosa para las personas que buscan controlar su fertilidad sin sacrificar su comodidad y bienestar.

Posible efectos secundario

El implante subdérmico, a pesar de sus numerosas ventajas, puede presentar algunos efectos secundarios que es importante conocer y manejar adecuadamente. 

Entre los más comunes se encuentra la alteración del ciclo menstrual, que puede manifestarse en forma de irregularidades, sangrados más ligeros o más abundantes, o incluso la ausencia de menstruación.

Algunas personas también pueden experimentar síntomas como dolores de cabeza, cambios de humor, aumento de peso, acné y sensibilidad en los senos. 

En casos menos frecuentes, puede haber dolor o incomodidad en el lugar de la inserción.

Para manejar estos efectos, es recomendable hablar con un profesional de la salud, quien puede ofrecer consejos específicos o ajustar el tratamiento si es necesario. 

Por ejemplo, para el manejo del acné o los cambios de peso, pueden sugerirse cambios en la dieta o en el estilo de vida. 

En el caso de los dolores de cabeza o los cambios de humor, técnicas de relajación o ejercicio regular podrían ser beneficiosos. 

Es importante recordar que muchos de estos efectos secundarios tienden a disminuir con el tiempo, conforme el cuerpo se ajusta al implante. 

Sin embargo, si los síntomas persisten o resultan particularmente molestos, es crucial consultar con un especialista para evaluar posibles alternativas o tratamientos complementarios. 

La comunicación abierta y regular con un profesional de la salud es clave para asegurar una experiencia satisfactoria y segura con el uso del implante subdérmico.

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Consideraciones especiales sobre el dispositivo del brazo

El implante subdérmico es adecuado para una amplia gama de personas, pero hay consideraciones especiales a tener en cuenta. 

Generalmente, es recomendado para aquellas que buscan un método anticonceptivo de larga duración y libre de estrógenos. 

Sin embargo, puede no ser la mejor opción para mujeres con ciertas condiciones de salud, como trastornos de la coagulación sanguínea, ciertos tipos de cáncer, o problemas hepáticos graves. 

Además, es importante discutir con un profesional de la salud sobre cualquier medicamento que se esté tomando, ya que algunos pueden interferir con la eficacia del implante. 

Por ejemplo, medicamentos para la epilepsia o la tuberculosis pueden reducir su efectividad. 

Asimismo, personas con antecedentes de depresión severa deben considerar otros métodos, ya que el implante puede influir en el estado de ánimo. 

Siempre es esencial una consulta médica previa para evaluar la idoneidad del implante subdérmico en función de la historia clínica y las necesidades individuales de cada persona.

Retirada del implante

Cuando llega el momento de retirar el implante, el proceso es tan sencillo y rápido como su inserción. Se realiza en un entorno clínico, donde un profesional de la salud aplica anestesia local en el área del brazo donde se encuentra el implante. 

Luego, realiza una pequeña incisión para extraer el dispositivo. Tras la retirada, la recuperación suele ser rápida, y la fertilidad de la persona generalmente retorna a la normalidad poco tiempo después. 

Es normal experimentar una leve molestia en el sitio de la incisión, pero esto suele desaparecer rápidamente. 

El proceso de retirada del implante es un procedimiento seguro y efectivo, permitiendo a las usuarias la flexibilidad de cambiar o detener su método anticonceptivo cuando lo deseen.

Ahora que tienes mayor información sobre el dispositivo del brazo y estás considerando dar un paso adelante en la planificación de tu futuro, es el momento perfecto para buscar asesoramiento experto. 

Te animamos a agendar tu consulta de anticoncepción en Oriéntame, donde profesionales especializados en salud reproductiva están listos para guiarte. 

En esta consulta, tendrás la oportunidad de resolver todas tus dudas y entender si el implante subdérmico se adapta a tus necesidades y planes a futuro. 

En Oriéntame, recibirás una atención personalizada y empática, asegurando que la elección de tu método anticonceptivo sea la más adecuada para ti.